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Vanessa, Patricio y Vera

Conocer a Emi fue lo mejor que nos pudo pasar en este hermoso camino recorrido para la llegada de nuestra Vera.
Soy madre primeriza y comencé a atenderme con otra obstetra que, al no saber mucho del tema, creí que estaba bien. Hasta que comencé a sentirme incomoda con ella y decidimos buscar otro. Pienso que un obstetra es más que un médico y que debía sentirme cómoda, informada y contenida ya que sería a la persona que le confiaría lo más importante de nuestras vidas. Y eso fue lo que nos hizo sentir Emi.
Así fue como después de buscar referencias, fuimos ya con una panza de 6 meses a verlo junto a mi pareja, y cuando salimos, sin decirnos nada, nos miramos y supimos que tenía que ser él.
A partir de ahí, nos acompañó muy profesionalmente y con mucha empatía durante los meses que quedaban, hasta que el 28 de abril quizo nacer Vera en el Sanatorio Finoccietto, del cual solo tengo buenas críticas.
Tardecito tipo 20hs. nos encontramos con Anahí, que con su amabilidad y dulzura me fue acompañando y guiando durante todo el trabajo de parto.
Luego de un par de horas con esfuerzo y buena música, nació Vera.
Tuve un parto hermoso y Emi tuvo muchísimo que ver con eso. Me sentí muy cómoda y RESPETADA por todo el equipo en todo momento.
No tengo más que palabras de agradecimiento para este excelente profesional!!!
GRACIAS EMI POR TODO!!!