Skip to content

Paula Jimena Rosas Alonso

Paula Jimena Rosas Alonso

Llegue a Emi a través de Instagram (lo descubrió mi cuñada), durante mi segundo embarazo.
Apenas lo conocí, le dije a mi marido «dimos en la tecla, Emi es nuestro obstetra». Lamentablemente, ese embarazo duró 8 semanas. Emi fue clave en ese momento, nos atendió de inmediato, nos explicó con detalle, nos consoló y alentó para q sigaramos buscando el hermanito/a para Benja.
Y así fue q luego de 6 meses, nos encotramos frente a él con un positivo entre las manos y unos miedos terribles (al menos yo).
Durante todo el embarazo, nos contuvo, nos escuchó y atendió con una sonrisa. Respondió todas mis dudas (y no es tarea fácil cuando tu paciente en medio hipocondríaca jaja).
Le planteamos la posibilidad de un PVDC y nos informó sobre los posibles riesgos, pero dispuesto a acompañarnos si es lo que queríamos como familia.
Llegada la semana 40.3, me agarraron nervios, miedos y ansiedad… Con algunas contracciones muy espaciadas en el fondo, decidí llamarlo, como siempre me atendió y me dijo, entre otras cosas, «si tenés miedo, no lo hagas, estoy en el Finichietto, vení q te opero…» obvio q me tome unos minutos para decidirlo junto a mi pareja y con una sonrisa (porque fue mi elección) lo llamé y le dije «quiero la cesarea».
Llegamos al sanatorio y ahi estaba Anahi esperándonos con una sonrisa.
Debo reconocer q la cesárea fue mágica, la anestesióloga una divina (no recuerdo el nombre) y super contenedora, Emi palabras mayores, tirando chistes a cada rato (luego de no se cuantos partos, creo q eramos como 4 esa noche) y siendo mi DJ (jajaja) buscando la banda q queria escuchar en ese momento tan importante.  Marina (la doc q me realizó los monitores de control), otra gran profesional! Que contenta me puse cuando la vi entrar y supe q iba a realizar la cesarea junto a él.
Cuando llegó Mateo, esperaron  un rato para cortar el cordón, me preguntaron si quería q me lo apoyen en el pecho contacto piel a piel (wow! nada de esto había pasado con mi primer hijo). Al salir del quirofano, me dan a Mateo para q lo prenda al pecho, otro pequeño gran detalle q no había vivido anteriormente y ahi volvió Emi para felicitarnos y ver q el gordo estuviese comiendo bien. Q felicidad! Y así subimos a la habitacion. Los 3 juntos, nuestro sueño estaba cumplido.
Ya pasaron casi 3 meses de este gran acontecimiento y no puedo dejar de emocionarme. Cuanto respeto y cuanta dedicacion. Estamos mas q agradecidos a Emi y a todo su equipo, tan humano y noble. Ahora por su culpa quiero un tercer hijo, para volver a vivir todo esto jajaja!!
Emi sos el uno!
Te queremos! Pau, Sergio, Benja y Mateo.

Abrir chat