Skip to content

Ayelen Lardapide

Ya con Dante por cumplir un año no quería dejar de contarles mi experiencia con este maravilloso equipo.
Toda mi vida soñé con ser madre, a mis cortos 22 años con mi marido estábamos decididos a buscar un bebe.
Después de 6 meses de búsqueda llego nuestro positivo y gracias a este hermoso equipo de profesionales tuve un final más que perfecto para el nacimiento de Dante.
Con 16 semanas, después de una mala experiencia con mi ginecóloga-obstetra decidí emprender mi casting
Luego de investigar en el grupo de Facebook de maravillosas mujeres pscqp anoté tres profesionales, Emiliano fue el segundo que vi. No llegue a conocer el tercero…
La primera impresión fue pensar: todo lo que leí en el grupo es real, es el medico perfecto para mí, lo encontré, suena un poco fuerte, pero puedo decir que lo amé.
Me dijo: Nosotros te acompañamos para que tengas un parto respetado:  cada uno tiene sus tiempos, respetado de personas que viven en el siglo 21, no vas a parir en una caverna.
A algunas personas susceptibles tal vez,  le podrían molestar sus palabras, pero yo entendí lo que dijo y la verdad por algo elegí parir en una institución y con profesionales acompañándome.
Estuve todo el día 03/01 con dolores, contracciones irregulares, molestias, Dante tenía un piecito debajo de mi costilla derecha así que ya estaba acostumbrada a sentir molestias. Realmente no me di cuenta de lo que me estaba pasando, vale aclarar que mido 1.57cm y tuve un bebe muy grande, mi panza era inmensa, hasta caminaba con dificultad las últimas semanas.
04/01- Me desperté tipo 5am mojada en la cama sobre un mini charquito que ya me di cuenta que no era pis. Llame a la partera Anahí, un ser que es capaz de dar paz y tranquilidad solo con escucharla.  Le expliqué lo que me pasó me pregunto por el resultado del  Estreptococo; como le dije que me dio positivo,  me propuso que nos viéramos 07:30 en la clínica.
Me pegue una ducha y salimos con mi marido sin saber si tal vez ese día volveríamos a las dos horas o si conoceríamos a nuestro tan soñado bebe.
Llegamos, nos atiende Anahí me pregunta cómo me sentía como venía de contracciones y demás.
Me revisa y tenía la bolsa ligeramente rota, 3 de dilatación, pero ya que el strepto me dio positivo y con la bolsa rota no me podían dejar ir. Nos dijo «bueno chicos HOY NACE DANTE».
Con mi marido nos quedamos paralizados, Anahí muy simpática nos dijo vayan avisando a los familiares si quieren, hoy van a conocer a Dante.
Me ingresaron directo a sala de parto por que no había libre salas de pre parto. Ahí me pusieron la vía. Un trabajo de parto que para mí fue largo, pero no duro más de 4 horas, con música, luz tenue y mi marido no necesitaba nada más.
Anahí siempre ahí, atenta a nosotros, pero sin molestarnos ni meterse en nuestro micro mundo que habíamos formado en esa sala de parto.
Si bien estuve conectada con la vía y el monitoreo en todo momento, pude bailar, caminar agacharme, libre movimiento absoluto. No hubo nada que haya querido hacer y no pudiera por estar conectada.
Cada contracción venia más seguida y con más fuerza que la anterior.
Venia aguantando muy bien pero ya no daba más, quería pujar y estaba muy cansada. Anahí llamo a la anestesista que habrá tardado unos 40 minutos en llegar.
Después de esos laaaargos 40 minutos fue la gloria: sentía las contracciones, pero no me dolían un alivio enorme se apodero de mi cuerpo.
Me relaje y junte fuerzas para la etapa final.
Anahí me tacto una última vez tenía 8 de dilatación hicimos dos pujos y llegamos a 10. Ya estábamos esperando a Emi, verlo y saber que todo lo que habíamos planeado para mi parto estaba pasando me dio mucha tranquilidad y fuerza para llegar a esta etapa final.
Una vez que llego él puje en cada contracción, al quinto pujo nació Dante 12:21 am 3.508kg 49,5 cm.
Primero Emi saco la cabeza y me dijo SACALO VOS, yo medio atónita enseguida lo agarré y lo puse sobre mi pecho todo pegajoso y calentito ese llanto entre cortado acompañado de su boquita haciendo puchero no me los voy a olvidar nunca. Fue un momento mágico. Mi marido dándome la mano diciéndome que ya faltaba poco que lo hacía perfecto que ya venía Dante fue increíble.
En todo momento estuvimos solos los 4 en la sala de parto Emi, Anahí y mi marido. Cuando estaba por salir la cabeza al tercer pujo Emi llamo a todo el equipo de médicos y enfermeros para Dante y ahí recién entraron.
Gracias Emiliano y Anahi, los llevo en el corazón y los recomiendo absolutamente.