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Cecilia

Conocí a Emi por un grupo de Facebook al cual llegue buscando una experiencia más respetada para la llegada de mí segunda hija. Hace 4 años había tenido a mí primer hija por parto natural y está vez quería que el recibimiento de mí pequeña fuera distinto, buscaba que llegara en un ambiente de respeto y calma.
Emiliano fue el primer obstetra que visite y al salir de la consulta recuerdo que llamé a mí marido y le dije «ya tenemos médico».
El embarazo transcurrió perfecto, muy tranquilo. Emi siempre se mostró sereno y me transmitió mucha seguridad; no me recetó ni vitaminas ni hierro por rutina (todos los valores siempre me dieron bien), hice esferodinamia y eutonia que me ayudaron a conectar con Olivia y prepararme para su llegada
Clara (mí primer hija) había nacido en semana 38 y todos confiabamos en que Olivia también llegaría en esa semana, pero no fue asi, decidio nacer en semana 39.2.
La semana anterior camine mucho, hice ejercicios con la pelota, tuvimos intimidad con mí marido … Todos los deberes!
El miércoles y jueves por la noche tuve contracciones y pensé que se desencadenaba el parto pero finalmente me dormí contandolas.
El viernes por la mañana me levanté con un sangrado y le escribí a Anahí; cómo tenía turno con Emi a las 14 acordamos que él me revisaría allí; lleve y fui a buscar a mí hija a la escuela y le pedí a mí marido que me acompañe al consultorio. Allí Emi me reviso y me dijo que estaba con 5 de dilatación! Pensé: que??? Así que acordamos que llamaría a Anahí para encontrarnos en el Finochietto.
Volvimos a casa, buscamos nuestras cosas y esperamos la llegada de mí suegra que se quedaría con Clari.
A las 17.30 estábamos en el Finochietto y nos recibió Anahí. Enseguida pasamos a sala de parto, me colocaron la vía, bajaron las luces y me preguntaron que música quería escuchar.
Tuve libertad de movimiento, pedí agua varias veces y me la trajeron, Marce (mí marido) estuvo conmigo siempre y todo el equipo mostró serenidad (era casi como si estuvieramos los dos solos), cuando estaba casi con dilatación completa colocamos la peri, sentí todo (en mí anterior parto había perdido la sensibilidad de las piernas y tenía mucho miedo de que me pasará igual, pero le pedí a la anestesista que por favor pudiera sentir y me prometió que así sería).
Emi llego y se sentó al lado mío, con una calma increíble, escuchó el monitoreo y me dijo «, viene con vuelta de cordón, pero no te preocupes, no pasa nada»…. El expulsivo fue un poco difícil porque parece que en mí anterior embarazo me desgarre el útero y cocieron y se había hecho un cordón (cómo una dureza) que no permitía que Olivia pase.
Emi y Anahí me felicitaban y alentaban en cada contracción. En un momento Emi me dijo «en la próxima sale, cómo querés que nazca?»…. «Así acostada» le dije y puje, salió la cabeza de Olivia y en la siguiente contracción me dijo Emi : podes sacar a tu hija y así fue, la puse en mí pecho y no lo podía creer…. Ahi estaba con sus hermosos ojos y mirándonos (nació 20.45). La dejaron un buen rato arriba mío y luego cortaron el cordón. Olí se fue con su papá a hacer los controles, Emi me coloco un poco de pervinox, me limpio y me dijo «listo, podes ir con tu hija» ( no tuve desgarro ni episio).….
5 minutos después estábamos los tres subiendo a la habitación.
Alguien una vez me dijo que cambiando la forma de nacer íbamos a cambiar el mundo…. Gracias gracias gracias Emi y equipo por ser parte de ese cambio. Por humanizar el parto y el nacimiento… Los volvería a elegir una y mil veces